Generalmente me levanto 7.30.
Ayer todavía era de noche y el teléfono marcaba 1 grado.
¿Qué pasó? ¿Cuándo fue que se fue el calor? Así que para pasar el frio a la noche hice la sopa de zapallo que te comparto más abajo.
Y ¿sabés qué? Me salió salada.
Por un segundo pensé que había perdido la mano de cocinero. Esa que practicamos durante años para aprender a condimentar con precisión.
Pero no, la mano está. Solo que a veces las cosas pasan.
Y en la cocina se corrigen.
Así que herví un poco más de zapallo, lo procesé, lo agregué a la sopa, y así balanceé el sabor.
¿Qué pensaste? ¿Que la iba a tirar? Y, no.
Mi mundo no funciona así. Yo soy cocinero. Y nosotros no tiramos nada.
Corregimos con lo que hay.
Sopa cremosa de zapallo
Para la sopa:
• Zapallo – 500 g
• Ajo – 2 dientes
• Leche – 800 g
• Caldo de verduras – 1/2 cubito
• Sal y pimienta a gusto (sin pasarse)
Pelá el zapallo, cortalo en cubos y ponelo en una olla con el ajo, la leche, el caldo y los condimentos. Cociná a fuego bajo hasta que el zapallo esté tierno. Procesá con cuidado y devolvelo a la olla.
Para los crutones:
• Pan – 200 g
• Aceite, sal y pimienta
Cortá el pan en dados chicos, ponelos en una placa con un chorrito de aceite, sal y pimienta. Llevalos al horno hasta que estén dorados y crocantes.
Serví la sopa con los crutones, un poco de perejil picado, pimienta y un chorrito de oliva. Y si te sale salada, ya sabés qué hacer :)
Juan.
PD 1: Usa zapallo, no uses Calabaza, te aseguro va a ser diferente. Si te animas una rodaja de jengibre y un poquito de curcuma van muy bien.
PD 2: Gracias a todos los que compraron el nuevo recetario de Hojaldres. Casi 60 ventas sin hacer promoción en redes. Luego te cuento algo curioso que me pasó con ese recetario. No tiene desperdicio.
